Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Supongo yo que todos tenemos nuestras trampas. Nuestros pensamientos ocultos, los cuales negamos cuando abrimos los ojos pero que siguen horriblemente presentes cuando los cerramos.

Aunque no queramos, a veces, nos acechan con sus punzantes quejidos de por qué los mantenemos escondidos.

Y es que si, los tienen que ver, se quejan de que no los mostramos y en cambio de que si mostramos cualquier pelotudez como "Que lindo que está el día" o "Que calor,eh?". Bajando en el ascensor, caminando al lado de alguien, o teniendo que atenderlo en el trabajo se te cruza un "Pa, tenes toda la pinta de ser el amor de mi vida, de calzarme justito" pero lo único que sale, cuando abrís los ojos y de boca para afuera es un "Como estas? Todo bien?"

Esas cosas de la mente que nunca vas a entender. Agraciadamente mi mente piensa más rápido de lo que habla. Mi boca es lenta, es sabia. Pienso yo que no se mete dónde no debe, aunque lo quiera (y se muera de ganas).

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Por alguna extraña razón me gustaba ir a los exámenes siempre con una lapicera nueva, Ya que creía que todo, absolutamente todo creaba una atmósfera buena o mala para poder darlo. Vaya a saber uno.que.era... pero esa sensación de que la lapicera esta contenta porque recién salió de la caja, con ganas más que nadie de escribir. Como un bebé cuando empieza a gatear, Gatea y ya quiere caminar. Pero de viejo ya cuando tiene varios kilómetros recorridos prefiere sentarse a esperar. Y yo no estoy para esperar a nadie, menos a mis lapiceras. Que la tinta y las letras fluyan con ganas...

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Que se supone que hay que hacer cuando algo te llega a las entrañas? Que aunque no quieras... Esta ahí. Y es algo que no conoces, pero sin embargo lo miras nomas y te revuelve absolutamente todo. Que es lo que deberíamos hacer?

Nunca fui una experta en medir los sentimientos. Es más, nunca pude medirlos. Pero nunca me había pasado de sentir que necesito algo que desconozco.

Sin embargo, siento como que lo conociera. De hace mucho.

Siento una confianza que en realidad no existe, pero que estoy segura de que existe. Es extraño, nunca viví algo así. Tanta complicidad por respirar el mismo aire..

Pero la vida siempre te enseña algo. Siempre creí que nunca te podrías sensibilizar por algo que no conoces. Nunca creí en esas cosas que el destino te pone enfrente y que encajan perfecto, sin ser la vida misma y lo que hagas, lo que te une.

Pero vos... vos me descolocaste. Hago el esfuerzo para que no vengas, pero me parece que encajas perfecto. 

Es cruel negarse a algo así, no?

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Que el mundo te encuentre atado de manos. En una silla, inútilmente inmóvil y desganado. Que te encuentre sin esperanzas de ser libre, de amar, de conquistar lo que más queres. Que te encuentre paralizado ante el entorno, y Ojalá que ahí te desates. Que tu voluntad sea más fuerte que cualquier cuerda que te imposibilite a hacer algo. Ganale a la vida, a los retos, a todos los escalones que te dice que hay que subir... aunque no veas ni un indicio de cielo cuando subas la escalera.

Tengo tanto miedo cuando te veo, que me desconozco. Me estremece verte cada vez que venís cerca. Pero te juro que ya no más, esto se va a dar vuelta. Voy a lograr que vos te estremezcas cuando te mire. Y no me importa si tengo que subir a tientas y sin luz. Se lo que hay del otro lado, aunque nunca antes lo haya visto. Lo sé, porque confío.

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Tu vida es muy suave. La escribís con lápiz y borras de a una letra, con mucho cuidado, sin darte cuenta que es horrible vivir al cuidado de la hoja y del entorno en el que escribas. 

La mía es con lapicera. De esas pilot negras que dejan la marca atrás de la hoja. Prefiero las huellas. Y no uso corrector... tacho. Tacho absolutamente todo lo que no sirva. De esa manera recordás lo que no sirve. Con lápiz no te acordás lo que borras, y probablemente lo repitas.

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Una simple pregunta: ¿Se puede dejar a alguien feliz siendo totalmente sincero?

Pensé toda mi vida que sí, y siempre luché por ser lo más autentica y transparente posible. Pero me temo que no es así. La verdad y la felicidad generalmente no van de la mano. Me duele reconocerlo, pero a la hora de "aconsejar" a alguien, si uno dice la verdad, parece que lo van a matar.

Uno tiene que aconsejar, usualmente, pensando lo que le gustaría al otro que le digan. Es triste, porque uno aconseja de manera tajante a veces por el bien del otro, para que no se encuentre con la misma piedra otra vez... pero no. No hacen caso. Cuando sucede esto, piensan que no los entendemos, que somos lo más insensibles que hay. Si les decimos que hay que hacer algo que duele, somos insensibles. No importa si es por el bien de ellos. Ni importa si es porque los queremos ver bien a la larga.

No. No importa nada de eso.

Somos tan idiotas los humanos que hasta que no nos damos la cabeza contra la pared, no aprendemos. No hay forma. No importa que nos adviertan... es lo mismo hasta que no lo aprendemos con sangre.

Mirá que somos pelotudos, eh? Funcionamos al revés

Pedazos de nada*

* Fragmentos que quedaron estancados, vamos a sacarlos a la luz en un momento de crisis.

Siempre me gustó coleccionar papeles, colgar diplomas, tener certificados de las cosas que hice a lo largo de mi vida. Tengo mi pared llena con esos cuadros, y carpetas que engordaron gracias al papelerío que tuvieron que comerse. Y para qué? No tengo idea. Incluso en el momento de obtenerlos me imaginé que no me redituarían mucho en mi futuro. Aún ahora que los veo, entiendo que nomás sirvieron como vagos recuerdos de mi infancia o adolescencia. Y quizá no solo eso, pienso que así es mi forma de vida. Así soy yo, y no hay vuelta. No solo en lo que era referido a estudio, sino que también guardo todas las tarjetitas de los 15, las cartitas que me hacían desde cuarto de escuela, todos mis cuadernos de la amistad, los poemas, t o d a s las fotos habidas y por haber... entre muchos otros. Debo de suponer que soy una maquinita llena de memoria que vive echando leña a los recuerdos, para sacar algún futuro productivo. O eso espero.