Tengo que cambiar mi concepción actual sobre el amor. No es sólo insistir. No se trata de darte la cabeza contra la pared, mes a mes, para ver la marca que deja de sangre en la pared. No se trata de seguir dándotela porque pensás que en algún momento el yeso va a pasar a ser algodón.
No.
El amor es un dar y recibir. Es algo bilateral, siempre digo que el amor existe mientras sea recíproco. Si no está ahí, no insistamos. Yo me jugué todas las fichas por algo que nunca vi, y que quise ver. Seguí, amé, dejé todo de mí en el camino... recibiendo indiferencia, vueltas de cara y bastante soledad. Pero uno nunca se da cuenta de las cosas cuando tiene encantado el corazón, se pierde el sentido de lo que está bien, y lo que está mal. Se pierde bastante eso que llaman sentido común.
Me la jugué por algo que no era, por algo que yo inventé. Algo que del otro lado no existió.
Por qué uno siempre insiste con aquello que no puede tener?
Cosa rara e ilógica, el corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario